Él es el “corazón” de la Logia. La existencia de este oficial se remonta a la antigua masonería operativa. Este esta destinado a socorrer las necesidades de los miembros de la Logia . Su función principal es la práctica de la caridad, en silencio y discretamente cubre las necesidades de los hermanos enfermos, en desgracia, y, de los pobres o necesitados.